CUADERNO DE ESTAMBUL V

La torre Gálata

Ella sabía que la agenda que guardaba sus deseos estaba escondida en la torre, pero no sabía cómo llegar, ni cuándo podría ir a rescatarla. Buscó durante días alguna parecida, escudriñó cada espacio y cada puesto callejero. Fue inútil, todo lo que encontraba no alcanzaba la belleza de aquella agenda mágica. Por fin, una tarde al volver del mar de Mármara, después de echarles de comer a las gaviotas en las islas del Príncipe, de observar cómo el sol se ponía tras los minaretes, decidió ir a rescatarla. Pero la encontró herida, sintió pena de ella misma por no haber acudido antes a su rescate y con dolor en sus ojos la dejó allí.